La red social Pinterest es una de las redes sociales favoritas por las marcas que están aprovechando esta nueva plataforma y nuevo concepto para colocarse en la mira de los internautas.
Vista como una red social en la que se está centrado particularmente la mercadotecnia, sus cualidades han promovido que no pocas marcas e individuos (pintores, fotográfos, diseñadores, etcétera) vean en ella una oportunidad para mostrar y vender sus productos o servicios, aunque también para reforzar su presencia en la web o algunos puntos como el branding o el engagement.
Hasta este punto todo parece marchar perfectamente, pero en los últimos meses se ha sabido de historias sobre marcas “pinneando” contenidos de los que no tienen derechos legales y las puede llevar a enfrentar una demanda por infringir los derechos de autor.
Ante esto, muchas marcas como medida preventiva han decidido adoptar una política de pinnear exclusivamente contenido propio; medida útil en términos legales, pero que parece atentar contra la propia estrategia de la empresa y la esencia de la red social.
A los usuarios muchas veces les gusta un contenido y es común que lo quieran “pinnear”, agregándolo así a su red de Pinterest, pero hay empresas a las qu
e no les gusta que se compartan sus materiales, ya sea por los derechos de autor o porque compraron ese contenido y algún usuario puede replicar con solo apretar un botón, destaca Merary Delgadillo, community manager de dosensocial.com.
Con el objetivo de limitar la responsabilidad de las marcas y los usuarios en este sentido, Pinterest ha promovido algunas acciones como el uso de licencias Creative Commons (CC), con la cual se puede compartir y usar un contenido sin romper leyes, pero también ha creado términos de servicio que se adhieren al Digital Millennium Copyright Act; e introducido el “No Pin Code” que los sitios web pueden instalar para bloquear a los visitantes que “pinnean” contenidos.
Además, ha actualizado las especificaciones de sus servicios -el 23 de marzo del 2012- con el fin de facilitar a los usuarios y a los derechos de autor a mandar un archivo al Digital Millennium Copyright Act Notice of Alleged Infringement. También ha creado las normas “Pin Etiquetted” que motivan a los usuarios a ser respetuosos, auténticos, acreditar sus fuentes y reportar cualquier contenido dudoso.
Pinterest también ha reconocido públicamente sus errores en este tema y ha declarado que está trabajando para resolverlas en un futuro cercano, como la creación e implementación de más licencias y otros códigos para las empresas que no quieran compartir sus contenidos, por ejemplo, uno que permitirá compartir el material que ya viene con sus códigos de autor, apunta Merary Delgadillo.
Para Jacobo Bañuelos Capistrán, catedrático del ITESM campus Ciudad de México, está situación no es nueva ni exclusiva de una red social, ya que la propia dinámica e interacción en la web tienen impacto sobre los contenidos que cada usuario sube a la red.
“Al subir contenidos a la red, en este caso, imágenes a Pinterest, debemos tener conciencia de que todo será público y va a estar disponible, lo que permitirá que se copie y tenga ese comportamiento viral, con lo que se pierde el control de ese contenido”, apunta el profesor adscrito a la cátedra de investigación de sociedad de la información y del conocimiento.
Por ello, antes de implementar tu estrategia de redes sociales o simplemente compartir tus contenidos a través de Pinterest, u otra plataforma de social media, estos son algunos puntos que deberías tener presentes:
Las políticas y condiciones de uso no es un documento que puedas pasar por alto, ya que estos establecen cuales son los puntos respecto a los contenidos e incluso para los datos personales. Por ello, antes de aceptar este contrato, que ofrecen todas las redes sociales al momento de crear un perfil, es necesario que revises al menos los apartados relacionados a estos dos temas.
Ten en cuenta que al aceptar el contrato de uso de la red social estás cediendo el derecho patrimonial sobre el uso comercial de cualquier contenido, es decir, das la autorización para que la red pueda comercializar tus contenidos, prácticamente durante un tiempo indeterminado, ya que en muchos de los convenios no queda claro cuánto tiempo quedarán en los servidores de la empresa de la red social.
También cedes la posibilidad de que la empresa venda toda la información dentro del perfil, lo que son datos personales, aun cuando no sea trate de tu nombre, pero sí son tu red de contactos y actividades, navegación, etcétera, que por tanto se convierten en una mercancía o moneda de cambio para otras empresas.
El ceder ese derecho de comercialización no significa que pierdas la propiedad intelectual del contenido, ya que ésta es inalienable, por lo que podrás presentar acciones legales contra el robo o mal uso de estos a otros individuos o empresas, pero no contra la red, porque al aceptar su contrato se autoriza toda esa lógica de cesión de derechos.
Si lo consideras necesario puedes pedir que se baje el contenido en esa red, pero no que se bajen de todos perfiles o servidores de toda la web.
Ten en mente que hay usuarios que bajan y guardan un contenido atractivo, sobre todo imágenes, y le dan otro uso, el cual puede ir desde ilustrar un trabajo escolar, o incluso profesional, hasta quienes la vuelven a subir a la red como si fuera propia.
¿Has considerado las políticas de uso de las redes sociales antes de subir tus campañas?