La Comunicación es clave en el desarrollo y crecimiento de las compañías y, en los últimos años, las empresas están afrontando los desafíos que les impone una sociedad cada vez más digital que transforma sus métodos tradicionales.
Más allá de una comunicación corporativa más transparente y horizontal, en la “era de la posverdad”, la legitimidad y la diferenciación de las empresas debe ser un hecho. Por ello, la formación de profesionales en un Máster en Comunicación Empresarial resulta cada vez más valorada por las compañías que necesitan contar con personas cualificadas para asumir un nuevo concepto de comunicación, donde la economía del marketing deja paso a la nueva economía de la reputación.
Precisamente, el último foro sobre las Tendencias de Comunicación Corporativa organizada por Llorente y Cuenca al cierre de 2017 puso de manifiesto estos retos empresariales ante la demanda social, política y laboral actual.
Como consecuencia de los cambios en el modelo de negocio, las iniciativas relacionadas con la innovación y digitalización tendrán impacto en la comunicación. Se consolida además la vulnerabilidad de los medios de comunicación y surgen conceptos como fake news o postverdad.
El fenómeno busca activar creencias generando confusión y desestabilidad, lo que provoca una pérdida de credibilidad sobre la naturaleza de las noticias. En este sentido, las empresas van a tener que trabajar en su propia confianza.
Por otro lado, la proliferación de canales y medios ha contribuido de forma exponencial con la explosión de contenidos digitales. Esto tiene una vertiente tecnológica y las empresas deben prepararse para generar una nueva cultura interna de hipertransparencia, que no significa informar de todo, pero sí tener la capacidad de explicarlo todo en tiempo real.
El fenómeno Big data se presenta como una de las tendencias más importantes que están impactando en el futuro de la comunicación. El big data facilita la labor de investigación y descubre pautas que pueden ser muy útiles para prevenir o anticiparse a todo tipo de hechos, pero que lleva implícito cierto riesgo.
En el año 2018 veremos también una actualización de la narrativa corporativa que se esforzará por complacer a un entorno de baja confianza.
El propósito corporativo es una gran oportunidad para aportar valor, para clientes, empleados y todos los actores sociales que debido a las decisiones de una empresa se pueden ver afectados, ya sea de forma positiva o negativa (stakeholders). Se plantea por tanto un reto que afecta al liderazgo: los CEO también van a tener que ejercer su liderazgo en la comunicación.
Libros recomendados
Como ves, en este 2018 se hace aún más necesario capacitarnos de manera efectiva en el área de la comunicación corporativa con el objetivo de aportar valor a nuestra comunidad.
Te espero en este año tan emocionante para el marketing digital. 😀
